martes, 18 de diciembre de 2018

Seis coronas navideñas de corazones rojos y otras.

He hecho algunas coronas para regalar, y del tipo "corazones rojos" llevo seis, que les enseño en esta entrada.
Salvo la base de la corona, que compré en los chinos, y a muy buen precio, el resto estaba todo en casa.
Tenía restos de paño rojo, que me había sobrado de hacer un abrigo estilo regencia, y que he aprovechado para realizar los corazones.
He recortado sobre una cartulina blanca, un modelo de corazón, que después he puesto sobre el paño, y los he recortado con tijeras de zig-zag, para que no se deshile fácilmente, porque no lleva remate.
Los he cosido con hilo de perlé blanco, restos de alguna labor que ahora no recuerdo.
Previamente, en aquellos que llevan algún adorno, sea un botón, un trozo de puntilla, etc, se lo cosía con hilo blanco a una de las dos partes del corazón.
Los redondeles rojos y verdes son de lazos de regalos de años pasados en Navidad, y que guardé, porque como dice el refrán: "El que guarda siempre encuentra".
Las bolas y campanas multicolores, las cogí en el rastro hace uno o dos años, y nunca les di uso..., hasta ahora.
Las piñas las recogí hace años en un pinar cercano.
Se me olvidaba que alguna de las coronas lleva cascabeles, que también compré en un chino.
El lazo blanco que lleva una de las coronas es de una Navidad pasada, para envolver regalos.
Los adornos planos, en fieltro, los regalaron hace dos o tres años con una revista navideña.
Y las nueces son viejas, de la temporada pasada.
Espero haberles dado alguna idea. 








lunes, 10 de diciembre de 2018

Guardatijeras con puntillas

Llevo varios años, creo que este es el tercero, en que hago guardatijeras para regalar en Navidad.
En este blog tengo una entrada con otro tipo diferente, correspondiente al 2017. 
No me propongo un modelo concreto, solamente busco las telas disponibles para esta manualidad, los complementos o adornos que me pueden servir entre los que rondan por casa, y a parir de ahí ya salen solos.
Tengo unas cartulinas con los modelos a recortar, y estos los coloco sobre la tela, y con tijeras que tienen picos, que cortan en forma de sierra, recorto las dos piezas del guardatijeras. De esta forma no se deshilan.
Ya procuro escoger telas que no se deshacen, para evitar tener que rematarlas, hacerles dobladillo o sobrehilar. En la fotografía de abajo se ve uno en el que no puse encaje, y la forma de coserlo es diferente, siguiendo los picos.
En este caso encontré un muestrario de puntillas de colores, y las coloqué sobre la tela, las recorté con las mismas tijeras.
Cosidas a mano con un hilo grueso.
Para cerrar un corchete, y para ocultar las puntadas de coser el corchete, distintas posibilidades, lazo, botones, miniflorecitas o bordados de rococó.
En este caso los hice todos del mismo tamaño, pero otros años hacía de dos tipos diferentes, para tamaño normal, y para las pequeñas.
Espero que les hayan dado ideas para adaptarlos a las telas y adornos que tienen en casa, y se animen a hacer sus propios guardatijeras.
Aún me quedan más encajes de otros colores, así que no descarto hacer alguno más.




martes, 4 de diciembre de 2018

Coronas navideñas ?

Tenía muchas ganas de hacer alguna corona navideña, y acabaron saliendo, entre otras, éstas que les enseño, y que a mi me parece que tienen un cierto estilo nórdico.
Han quedado un poco minimalistas, y creo que pueden servir de adorno, no solo en Navidad.
Estas tres primeras llevan únicamente los corazones y las plumas de faisán.
Llevaba buscando los armazones de madera, y o no me convencian, o me parecían caros, porque quería comprar unos cuantos.
Una amiga me comentó que había comprado uno por un euro, y allí nos dirigimos. Cogí los 16 que había en la tienda. Un euro me parece un precio estupendo.
Todos los materiales utilizados los tenía en casa. La tela marrón era de una camisa mía que el invierno pasado se rasgó en una manga, de plancharla.
Creo que es una especie de lino, o un algodón que recuerda al lino. Me había gustado tanto, que me daba pena tirarla, y cuando pensé en hacer las coronas, los corazones, apareció milagrosamente, y aquí está.
Las cosí con un hilo de algodón, que se rompe muy fácilmente. Ha sido lo peor, pues cada poco tenía que volver a enhebrar la aguja.
Lo primero, una vez cortados los corazones, (para lo que hice un modelo en cartulina, para que todos fueran iguales), era coserles las puntillas, telas o bordados.
 Los adornos de los corazones los recorté de pequeñas muestras de telas, que pertenecían a varios muestrarios que hace años me regaló una amiga.
Eran semejantes a este que les pongo aquí, y que de momento está sin usar.
Cuando tenía cosido el 70 % del perímetro de los corazones, los rellenaba con guata procedente de un viejo cojín.
Como estaba muy aplastado por el uso, lo corté en tiras, y posteriormente en cuadraditos, que esponjaba antes de rellenar los corazones.
 Todos son diferentes en cuanto al adorno que llevan, pues depende de como he podido recortar los pequeños trocitos de puntilla, encaje, etc.
 Los he pegado al armazón con una pistola de silicona. Es fácil, y bastante rápido. Antes de pegarlos estudiaba la composición de los corazones y las plumas, para que la corona quedara equilibrada estéticamente.
Las plumas de faisán me las ha regalado mi sobrino, que tiene una granja de faisanes.
 Como no estaban en buenas condiciones, porque son de las que se caen al suelo, las he recortado, como he visto hacen las sombrereras para los tocados.
 Antes de ponerlas en las coronas las he hervido en agua con unas gotitas de lejía, para eliminar los posibles bichitos que pudieran traer.
Se dejan secar sobre papel de periódico, y se peinan un poco. Después las recorto y pego con silicona.
La cuarta corona lleva pequeñas piñas que recogí hace años en un pinar cercano al pueblo, y que en principio eran para una chimenea. 
Lleva también nueces viejas, que quedaron en el bol de las nueces y nunca se comieron.
Y dos avellanas que se colaron entre las nueces. 
En todas ellas falta la cinta en la parte superior, para colgarlas. Seguramente será tipo lazo de gasa, o algo parecido, dependiendo de lo que encuentre por casa.
Esta lleva también un lazo sencillo, de tela de saco, que vino con algún regalo, y que guardé, "por si acaso".
La quinta corona es de corazones blancos, realizados con una tela de restos de algún otro trabajo, ropa, etc, que ahora no recuerdo.
Lleva un lazo en la parte superior del mismo origen que el de tela de saco, y otro en papel doble, blanco, que compré hace años en Navidad para adornar los regalos de Navidad, y que al final no utilicé.
Los adornos y los corazones han llevado el mismo proceso que en las otras coronas.
Les animo a que se pongan "manos a la obra". Para mi ha resultado muy entretenido hacerlas.
Agradezco comentarios, y si te gusta puedes hacerte seguidora del blog.